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Micro weddings en San Miguel de Allende

Si estás pensando casarte durante los siguientes meses, sin duda, una micro wedding suena como una buena idea. Pocas personas, los más allegados a ustedes, en un lindo destino de México. San Miguel tiene muchos lugares lindos para dar el sí y celebrar el gran día. Foto: Stephania Campos

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Llegar a San Miguel de Allende es bastante sencillo desde varias partes del país y eso, se agradece cuando hablamos de una boda de destino. Los invitados a tu micro wedding podrán pasar dos o tres días celebrando con ustedes y, al mismo tiempo, disfrutando de esta ciudad que se ha colado en nuestros corazones.

Foto: Abby Jiu


Hoteles en San Miguel para tu micro wedding

Desde grandes y famosas cadenas hoteleras hasta los boutiques que están tan de moda: la oferta hotelera es amplia, variada y para todos los gustos. Es una boda de destino lo ideal es ofrecer varias opciones pero también, concentrar a todos en una propiedad facilita las actividades previas y posteriores al enlace como cocteles o cenas. En ocasiones, hasta te favorecen con promociones y tarifas especiales. Aquí, algunos de nuestros sitios de hospedaje favoritos.

Foto: Stephania Campos

 

 


Hotel Matilda


Belmond Casa de Sierra Nevada

Con el valor único que cuenta la historia, este hotel de lujo está compuesto de casonas espectaculares. Patios, amplias terrazas y cocina de autor exquisita, se complementan con la experiencia de ver la puesta de sol y brindar por el amor. ¿Ya lo conoces? Aquí más detalles. 


Casa Lani

Tú y tus invitados sentirán, aquí, el calor de hogar en todo su esplendor. Se trata de un Luxury Bed & Breakfast en el corazón de la ciudad. Será como una casa, lejos de casa… Da click aquí.


Live Aqua San Miguel de Allende Urban Resort

De lo más nuevo en la región, se trata de un hotel que brota arte y luz por sus poros. Amarás la zona de alberca con hamacas, el spot perfecto para desconectarse y convivir con tus invitados. Visita su página web.


Rosewood San Miguel de Allende

Se trata de uno de los lugares más románticos de la ciudad. Pueden volar en globo partiendo de su gran explanada, comer delicioso, pasear por sus jardines de lavanda y brindar en su bar que custodia, desde las alturas, todo los alrededores. ¡Te vas a enamorar!


Qué hacer en San Miguel de Allende

Porque querrás que tus invitados la pasen increíble, aquí algunas ideas de nuestros amigos de México Desconocido para que compartas con ellos más allá de tu boda.

Bodega Dos Búhos

Camino a Querétaro, a ocho kilómetros de San Miguel de Allende, se llega al sitio ocupado por los viñedos de la Bodega Dos Búhos. En tres hectáreas de cultivo, sobre una pendiente suave y expuesta al sur, las uvas —Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Chardonnay, Moscato Giallo— crecen motivadas por las cosas que interesan a Diana Maycotte y su esposo: el esteticismo y los métodos sustentables.

El Charco del Ingenio

Este jardín botánico, a pocos minutos de la ciudad, comprende 67 hectáreas de reserva natural de gran biodiversidad. Aquí es posible admirar una de las colecciones más completas en el mundo de las cactáceas y suculentas mexicanas.

Las Monjas

En la esquina de Hernández Macías, se encuentra el conjunto conocido como Las monjas. La iglesia, construida en el siglo XVIII, tiene un espléndido retablo y pinturas de Juan Rodríguez Juárez.

Fabrica “La Aurora”

Lo que hace varios años fuera una fábrica textil, hoy alberga lienzos, esculturas y productos artesanales de talentosos artistas habitantes de San Miguel de Allende.

Con apenas 12 años de historia El Centro Cultural de Arte y Diseño, La Aurora, es uno de los principales atractivos de la ciudad.

Cañada de la Virgen

A 30 kilómetros al suroeste de San Miguel de Allende se halla esta zona arqueológica. Se trata de un asentamiento prehispánico en la frontera septentrional mesoamericana. Para llegar es preciso recorrer una antigua calzada ceremonial que comienza en la Cañada de La Caja.

El apogeo de este sitio tuvo lugar entre el 600 y el 900 d.C. Su traza urbana estuvo estrechamente relacionada con la observación celeste: los cerros circundantes sirvieron de ejes y referencias, al tiempo que las construcciones se orientaron hacia las salidas y puestas del sol y de la luna.

 

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