Una marca que te enorgullezca
“Crea tu propia marca que te sientas orgulloso de representar y que tenga todos los valores en los que crees”, recomienda la entrevistada. Por esas fechas que estaba en transición de empleada a emprendedora, Silke compró un terreno en Tlayacapan Morelos e hizo una casita que visitaba cada fin de semana. Ahí conoció a productores de frijoles de variedades exóticas en peligro de extinción. Hoy, La Comandanta ha vendido cinco toneladas de frijol a Estados Unidos y Singapur; y está por enviar a Europa.
Esto ha sido posible porque esta emprendedora se ha empeñado en ofrecer la mejor calidad de frijol que existe hoy en México: sin agroquímicos, de colores y tamaños hermosos, nunca antes intervenidos por la agroindustria, crecido en tierras de productores mexicanos de pequeña escala; frijoles seleccionados a mano y empaquetados bajo una imagen premium, dándoles todo el valor que realmente merecen estas “joyas” o semillas criollas.
“Todo esto hizo que nuestro primer cliente fuera City Market. Hoy, después de nueve años, hemos logrado promover y ofrecer más de 10 variedades nunca antes vistas en supermercados en México, ayudando así, a su preservación”, afirma.
Antes, en las ciudades, no se escuchaba hablar del frijol ayocote morado. Nadie sabía qué era. Hoy gracias a su demanda más productores han vuelto a sembrarlo pues ya existe el mercado. La línea de frijoles es vendida tanto empaquetada como a granel (ayocote morado y amarillo, vaquita negro y rojo, moro, san francisco, sangre de toro, ensaladilla, palacio, etc.).
La Comandanta también tiene en su catálogo el chilpetín silvestre, piloncillo, jamaica, miel, mole, maíz azul criollo para tortillas, sal de mar, totopos y tostadas horneadas, entre otros productos. El 50% de las ventas de La Comandanta se las lleva la salsa macha en diferentes presentaciones: estándar, familiar, jumbo la de 3 kg, etc. “Este producto es súper exitoso. Rota rápido y abre el camino a los demás productos del catálogo”.