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¿TE SUBES A LA MONTAÑA RUSA?

Siembra la empresa que serás mañana desde hoy, empezando por abandonar voluntaria e inteligentemente toda zona de confort.

Por: Claudia M. Sheppard Swipe

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Curiosamente, a algunas personas les encantaría que su empresa funcionara así, aburridamente plana y predecible. Como en “piloto automático”.

Eso no es posible. Y menos si ambicionas crecer.


A mis clientes suelo advertirles sobre los riesgos de la comodidad y la inactividad… ¡Ojo con las temporadas de estabilidad que se alargan sospechosamente! ¡Cuidado con las zonas de confort que nos arropan y convencen a mantenernos en ellas! ¡hay que estar alertas! Confiarte tiene sus consecuencias.

Lo que sí se les desea a todas las personas, es que encuentren en la adversidad una oportunidad para crecer y fortalecerse. Si la pandemia o la actual inflación te arrancó de tu zona de confort, entonces puede ser algo malo… o algo bueno para ti.

 


No sé qué pienses, pero para mí el método más eficaz para superar obstáculos es el trabajo. No conozco otro. Pero, además, me consta que las personas que ponen manos a la obra, además de avanzar más lejos y más rápido que otros, son más felices.

Ahora, suponiendo que ya lanzaste tu negocio y empiezas a ver resultados, lo idóneo es que te preguntes cuándo y cómo hay que cambiar. No esperes a que las circunstancias te apresuren.

A los emprendedores con los que trabajo les recomiendo insistentemente que no se duerman en sus laureles. Que no den por hecho que la bonanza que viven será para siempre.


Seguramente hay muchas formas de identificar cuándo hay que cambiar. Te comparto dos que a mí me han funcionado:

Es decir, cuando empiezas a descender en la montaña rusa, es el momento de replantear tu modelo de negocio, tu oferta de valor, tu estándar de servicio y, en especial, los indicadores de satisfacción y lealtad de tus clientes. A veces bastará que hagas ajustes tácticos. En otras ocasiones, tendrás que realizar transformaciones a fondo.

Como la pandemia, la guerra entre Rusia y Croacia, o la inflación e inestabilidad económica. También cuando aparecen nuevas tecnologías, nuevos competidores, nuevas leyes o reglamentos o nuevos patrones de consumo.

Hay que monitorear constantemente el contexto, así como analizar y actualizar escenarios probables para que puedas reaccionar lo más rápida y acertadamente.


Ahora, suponiendo que ya identificaste la necesidad de dar un siguiente paso, ya sea escalar o adaptarte a un nuevo entorno, lo que sigue es asegurar que cuentes con lo necesario.

Te sugiero que dispongas al menos de estas capacidades:

  1. Los sistemas y plataformas necesarios para operar de manera óptima. Debes contar con el soporte tecnológico adecuado para hacer más con los mismos recursos y tiempo.
  2. Procesos definidos. Los sistemas por sí solos no operan tu negocio. Necesitas definir con claridad cómo vas a vender, atender, cobrar y entregar tus productos o servicios. Sin procesos claros, es probable que pierdas dinero, tiempo y clientes.

¿Qué opinas?

Las transformaciones exitosas no son obra de la casualidad. Estoy convencida de que los resultados positivos y sostenibles no caen del cielo sino que se cultivan y cosechan.

Siembra la empresa que serás mañana desde hoy, empezando por abandonar voluntaria e inteligentemente toda zona de confort.

Claudia M. Sheppard, emprendedora mexicana, estratega y mentora de negocios, CEO y Fundadora de The Latin Powerhouse. Escríbele a: [email protected]

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