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UN CEREBRO IMPULSADO POR LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL PARA GESTIONAR TU NEGOCIO

Iron Man hablaba con Jarvis, una inteligencia artificial ficticia. Hoy ya no es ciencia ficción con IKA.ai, el Jarvis de los negocios en la vida real creado por Carlos Mats.

Por: Estivaly Calva Swipe

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Carlos Mats se ha convertido en un referente en el tema de la Inteligencia Artificial (IA). Porque se dio cuenta muy temprano, en el 2017, que la IA iba a cambiar el mundo. Él siente que básicamente fue criado por el Internet. Siempre persiguió sus pasiones, lo que a él gustaba. Se obsesionó en la web, buscando y aprendiendo.

Inspirado en Jarvis, una inteligencia artificial ficticia que hablaba con Anthony Stark para ayudarle con las armaduras de Iron Man, Carlos Mats creó IKA.ia en 2019, lo que considera que es el Jarvis de Iron Man solo que en la vida real.

“Cuando salió la película en 2008, hace 16 años, era ciencia ficción y ahora en 2024 ya es hora de tener este tipo de interfaces inmersivas, conversacionales e inteligentes que lleven a otra nueva forma de computación”, asegura en entrevista.


Un emprendedor de un país subdesarrollado

Desde el 2017 Carlos ha estado construyendo esta tecnología. Por eso, para le es muy satisfactorio ver el comportamiento del mercado. “Ahora el público se da cuenta de que estábamos en lo correcto y ahora me invitan a dar conferencias para enseñar cómo ha evolucionado la IA”.

Carlos Mats asegura que el hecho de ser emprendedor es súper difícil; y más porque comenzó a emprender en un país subdesarrollado como Honduras, de donde es originario. “Es 100 veces más complicado”, expresa. “Pues hacer algo innovador es un billón de veces más difícil porque la innovación normalmente no viene de países en vías de desarrollo”.

Pero gracias a que fue criado por Internet pudo pensar mucho más grande. “En mi cabeza no existen barreras”, asegura. Pero lo más difícil ha sido ‘picar piedra’ y es lo que ha estado haciendo para llegar a la meta. Hoy Carlos es un emprendedor consumador, conferencista internacional y artista galardonado. “Yo tengo una firme convicción: Hay que comenzar lo más rápido posible para cumplir tu visión. No tienes que esperar a que nadie te enseñe. Sencillamente uno aprende haciendo. No pospongas el primer paso”, afirma.


La evolución del empresario

Desde pequeño a Carlos Mats le inculcaron el valor del trabajo. Su mamá le pagaba por planchar los pañales de sus hermanas. De esa manera ahorraba dinero para poder comprar revistas de videojuegos. Cuando estaba en la preparatoria ya sabía que iba a fundar un estudio de tecnología, arte, diseño e innovación.

“Mi primera empresa la comencé a los 21 años. Eric Jordan de 2 Advanced Studios me inspiró a hacer Xchematic. Yo quería ser como él. Era mi ídolo. Los diseños y animaciones que él hacía eran súper avanzadas. Entonces, a finales de los 90 y principios de los 2000 básicamente me obsesioné con mis pasiones”, comparte.

Nunca olvidará su primer trabajo como operador telefónico en un call center en Tegucigalpa, Honduras. En ese tiempo estaba ahorrando para comprar su propia computadora. Recuerda que pedía los turnos de la noche o los días feriados para poder tener acceso a Internet y seguir aprendiendo pues en casa no había wifi.

 


Carlos empezó haciendo páginas web para empresas. Después evolucionó y se hizo fotógrafo. Avanzó y empezó a hacer vídeos. Se convirtió en productor. Posteriormente comenzó a hacer realidad virtual y aumentada, así como inteligencia artificial. También es cineasta.

“En 20 años todas mis pasiones han sido posibles a través de mis dos empresas: Xchematic e IKA.ai. Con dos décadas de experiencia y conocimiento pude imaginar el software del 2030, el cómo iba a ser el futuro hacia la IA y realidad aumentada; y el cómo las interfaces entre los humanos y las máquinas iban a cambiar completamente. Ahora ya hablamos con la inteligencia artificial”.

El emprendedor comparte que al final de esta década o principios de la próxima va a ser posible hablar con hologramas (interfaces en forma tridimensional).


El Carlos Mats del futuro

El futuro se viene bastante rápido, dice Carlos. “Hace tres años no sabíamos que íbamos a estar en una ola acelerada de innovación. La ciencia ficción no está tan lejos como uno cree. Entonces, la forma en la que yo me miro es que voy a seguir haciendo el trabajo que hago ahora en Latinoamérica y llevando mi visión al mundo”.

El empresario hondureño ve el futuro como una interfaz universal de interacción entre humanos y la inteligencia artificial. Por eso, su misión es que IKA.ai sea la plataforma de productividad por default para las empresas.

¿El mensaje final? “Estamos en una oportunidad de oro. Porque son pocas veces en las que una tecnología transformadora como el Internet o la inteligencia artificial emerge. Entre más rápido te subas a la ola, vas a estar mejor preparado y prosperarás”.

 

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