Posiblemente te pasó: tenías grandes planes, tal vez un viaje, la compra de un auto, cambiar de trabajo, emprender o, si ya tenías un negocio, llevarlo al siguiente nivel. Tal vez acababas incluso de firmar un jugoso contrato y de pronto… te enfrentaste a una pandemia para la que nadie estaba preparado.
Estoy segura de que 2020 nos ha dejado lecciones muy importantes, tanto en los negocios como en la vida personal. Las crisis son muchas y constantes, estas nos ponen a prueba, nos retan y nos hacen crecer.
Afortunadamente, es algo en lo todos podemos trabajar, en desarrollar nuestra capacidad de resiliencia, adaptación, flexibilidad y observación, características que sin duda requiere un emprendedor y que son las que permitieron a muchos sobrevivir durante esta adversidad. En pocas palabras, desarrollar un espíritu inquebrantable.
La buena noticia es que no solo se trató de sobrevivencia. En esta edición hay muestras claras de que realmente en las crisis se pueden encontrar oportunidades. El ejemplo lo leerás en Rotamundos, una startup que se atrevió a salir al mercado en plena pandemia y en uno de los sectores más golpeados: el turismo.
Javier Cárdenas, su fundador, observó en el turismo local y rural una veta y en poco más de un año de operaciones ya tiene presencia en cinco países de Latinoamérica. Claro, él sabe que es solo el comienzo y que su maleta debe ir cargada de paciencia, creatividad, una libreta para hacer números y muchos contactos.
Al igual que Javier, quien ya se atrevió a dar el primer paso, también Mariana Carrillo, cofundadora de Chez Vous, abrió un time café que aprovecha la tendencia del trabajo híbrido para fortalecer su modelo. ¿La lección?, siempre estar alerta a las voces del mercado y maximizar los recursos durante una adversidad. Incluso, ella misma hizo entregas de sus productos.
Espero que esta edición te sirva de guía para tu supervivencia e inspiración para empezar tu negocio o redefinirlo.
“Los soñadores prácticos no se rinden”, escribió Napoleon Hill, y yo estoy de acuerdo.