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Opinión

NATURALICEMOS LA EQUIDAD

¿Por qué las mujeres debemos seguir pidiendo espacios de reconocimiento laboral?

Por: Martha Favela Swipe

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Cuando estudié Ingeniería Mecánica hace más de una década era la única mujer de la clase y, aunque ha pasado el tiempo y ahora hay mucha más presencia femenina en las clases de ingeniería a nivel mundial, las cifras entre hombres y mujeres siguen siendo muy dispares.

En cuanto a los puestos de liderazgo en el país, el 33% están ocupados por mujeres. Pese a que es una cifra que poco a poco se va acercando a la equidad, para las mujeres llegar a un puesto de alta gerencia es solo el primer desafío de una serie de retos que van apareciendo en el camino, comenzando por la validación de los pares masculinos.


Por esto, es importante naturalizar el mirar sin sesgos, al mismo tiempo que levantar la alerta de micromachismos no debería ser algo incómodo que traiga represalias, sino que debería considerarse una oportunidad para realizar una transición hacia una estructura organización consciente y basada en el respeto.

Recuerdo una de mis primeras experiencias laborales en puestos de alta jerarquía, de entrada, no me otorgaron un coche, ni me asignaron la misma remuneración que a mi antecesor, pero decidí que con el tiempo demostraría que mis esfuerzos eran igual de eficientes que los de mi compañero.


Pero nuevamente el “demostrar” estaba siendo importante para mi. Cuando tomé consciencia de que no era mi responsabilidad demostrar, sino más bien naturalizar la equidad es que me sentí mucho más segura de lo que soy capaz. Pero este no es solo un cambio interno o personal para sacudirnos los patrones aprendidos, sino que es un cambio social y organizacional total.


Es necesario trabajar en una transformación que impulse a las niñas a creer en sus habilidades y a sentir que pueden ser y hacer todo lo que quieran. Cuando era adolescente mi hermano solía decirme que yo “era como un hombre”, porque hablaba de negocios y tenía ideas creativas.

Hoy miro hacia atrás y la verdad es que no estaba siendo como un hombre, estaba siendo una mujer, una mujer que desde siempre ha creído en la equidad.

Me gustaría que pronto llegara el momento donde no existieran este tipo de comentarios, donde no se masculinice a una mujer por ser líder ni se feminice a un hombre que no lo es.


Las nuevas generaciones de empresarios, Chiefs y emprendedores podemos hacer cambios radicales, equiparando los equipos de trabajo, abriendo oportunidades y permitiendo el crecimiento laboral más allá de las características individuales de las personas.

Somos una nueva generación de compañías que deben hacer caer los patrones arraigados y poner la inclusión y la equidad como pilares principales en materia organizacional.

Hoy soy Chief Marketing Officer en Políglota, si, Chief. No solo eso, también soy mamá, novia, viajera, ingeniera, hija, entre otros roles y ninguno de ellos me ha impedido crecer y soñar con los otros.


Sin embargo, uno de los grandes desafíos para promover la eliminación de los sesgos es la educación, entregar herramientas a las niñas para que se sientan cómodas en materias STEM, aprendiendo nuevos idiomas y siendo curiosas en general. De hecho, el 46% de las estudiantes de Políglota son mujeres.

Las nuevas generaciones deben saber que ser mujer ya no es un obstáculo, al contrario, contamos con una serie de habilidades que nos hacen idóneas para asumir cualquier responsabilidad y debemos estar seguras de eso.

Es importante que continuemos abriendo camino para las mujeres que pronto se integrarán al mundo laboral, para que ya nadie deba pasar por invalidaciones basadas en género.


El compromiso también recae en seguir repensando la cultura empresarial actual para establecer normativas y políticas internas que aseguren un ambiente igualitario y abierto, pero sobre todo libre de cualquier discriminación o abuso hacia las mujeres.

Ojalá que los siguientes años las cifras se equilibren aún más y que las experiencias que cuento en esta columna ya no sean parte del cotidiano. Sigamos dando herramientas a las niñas para que puedan convertirse en líderes globales.

Martha Favela, CMO de Políglota

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