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Opinión

Retener a las madres trabajadoras en las empresas: estrategia para contar con habilidades únicas

Por: Ricardo Rodarte Swipe

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El equilibrio entre la maternidad y el desarrollo profesional es un desafío que enfrentan las mujeres en todo el mundo. Aunque hay avances en algunas organizaciones, gracias a las modalidades remotas, las estructuras laborales tradicionales siguen sin estar totalmente diseñadas para responder a las necesidades de las madres ni ofrecen alternativas efectivas que aseguren la continuidad de su vida laboral con las mismas condiciones que sus pares.

En México, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), aproximadamente el 40% de las mujeres entre 15 y 64 años están ocupadas en el mercado laboral. De acuerdo con nuestra encuesta con motivo del Día Internacional de la Mujer, 65% de las mujeres participantes asegura que han tomado acciones, como pausar o renunciar a su empleo, para congeniar sus responsabilidades familiares con sus carreras profesionales. Otras han tomado opciones de empleo más flexibles, han reducido sus horas de trabajo o se han visto obligadas a rechazar una buena oferta de empleo.

En México, de acuerdo con datos del INEGI, aproximadamente el 40% de las mujeres entre 15 y 64 años están ocupadas en el mercado laboral.

Lo anterior resulta desfavorable para las mujeres que transitan por esta etapa, pues su desarrollo profesional se ve mermado y, por consecuencia, sus ingresos están afectados por la brecha salarial de género.

| Disparidad salarial

De acuerdo con datos oficiales en México, las mujeres ganan 16% menos que los hombres; esta disparidad salarial afecta aún más a las madres en su capacidad para alcanzar su potencial profesional y económico.  A su vez, se vuelve un obstáculo para lograr su independencia financiera y la toma de decisiones en beneficio propio o de su familia.

De esta manera, la clave para que las organizaciones venzan la problemática para las madres trabajadoras es la flexibilidad laboral y la comunicación entre ambas partes para diseñar estrategias ‘ganar-ganar’ que aumenten la satisfacción de estas empleadas y, por ende, su productividad.

De acuerdo con datos oficiales en México, las mujeres ganan 16% menos que los hombres; esta disparidad salarial afecta aún más a las madres en su capacidad para alcanzar su potencial profesional y económico.

La flexibilidad laboral puede manifestarse de diversas formas, en horarios y días de trabajo flexibles y la posibilidad de realizar trabajo remoto. Estas medidas permiten a las madres adaptar su jornada laboral a las necesidades de sus familias, lo que contribuye también a reducir el estrés y mejorar su bienestar emocional.

Este tipo de acciones son fundamentales para retener el talento, aprovechar las habilidades y rasgos únicos que las madres trabajadoras aportan a las empresas, considerando que son colaboradoras que sobresalen en sus funciones y que brindan un sólido desempeño a los equipos.

| Experiencia maternal

Por lo anterior, es de vital importancia que los líderes de todas las organizaciones comprendan que las mamás profesionistas desarrollan, a través de su experiencia maternal, la capacidad de gestionar múltiples tareas, tomar decisiones bajo presión y resolver problemas de manera eficiente.

Las mamás profesionistas desarrollan, a través de su experiencia maternal, la capacidad de gestionar múltiples tareas, tomar decisiones bajo presión y resolver problemas de manera eficiente.

A medida que las empresas implementen políticas de flexibilidad laboral podrán beneficiarse de una mejor retención de talento, mayor motivación de los empleados y superior reputación como empleadores. Reconocer las habilidades de las madres trabajadoras y atender sus necesidades puede construir entornos laborales más inclusivos y equitativos, lo que contribuye, a su vez, a su éxito a largo plazo. AN

 


Ricardo Rodarte es director general de OCC

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