Blancpain: maestría relojera que desafía el tiempo
El Villeret Tourbillon Volant Heure Sautante Minute Rétrograde combina, por primera vez en la maison, tres complicaciones de alto nivel y una esfera de esmalte Grand Feu, reflejando la excelencia técnica y artística de la manufactura más antigua del mundo.
Por: Luis Peyrelongue
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| Artesanía legendaria
Blancpain, fundada en 1735, es la manufactura relojera más antigua del mundo y se distingue por dedicarse exclusivamente a la relojería mecánica de alta gama, combinando tradición e innovación. Entre sus aportaciones más relevantes se encuentra el legendario Fifty Fathoms de 1953, pieza que estableció los estándares de los relojes de buceo modernos.
La maison también jugó un papel crucial durante la crisis del cuarzo en las décadas de 1970 y 1980, preservando la artesanía mecánica en un momento en que muchas firmas abandonaron esta tradición. Asimismo, ha demostrado su dominio en el arte de las grandes complicaciones, como el tourbillon, la repetición de minutos, el calendario perpetuo, el cronógrafo flyback, el calendario chino tradicional y la primera combinación de un tourbillon volante con un carrusel.
A ello se suma el valor artístico de sus talleres especializados, donde maestros artesanos trabajan técnicas, como el esmaltado pintado a mano, el grabado, el shakudo (aleación japonesa con una pátina azul-negruzca única) y el damasquinado, logrando piezas exclusivas y personalizadas para cada cliente.
| Diseño limpio y sofisticación técnica
En esta ocasión presentamos el modelo Blancpain Villeret Tourbillon Volant Heure Sautante Minute Rétrograde referencia 66260 3633 55 B. Un reloj de alta relojería que combina, por primera vez en la maison, tres complicaciones de alto nivel y una esfera de esmalte Grand Feu [gran fuego], resultando un reloj de diseño limpio y sofisticación técnica. Innovación mecánica y complicaciones únicas.
La caja, disponible en oro rojo de 18 quilates o en platino, tiene un diámetro de 42 mm que enmarca una esfera realizada en esmalte champlevé Grand Feu blanco pintado a mano. El corazón de esta creación es el calibre de carga manual 260MR, con una notable reserva de marcha de 144 horas (seis días).
Entre sus complicaciones destacan las siguientes:
1) El tourbillon volante, perfeccionado por Blancpain al eliminar tanto el puente superior como el inferior, sustituyendo este último por un disco de zafiro transparente. Este ingenioso avance crea la ilusión óptica de que el tourbillon flota en el vacío, ofreciendo una visión libre y fascinante de su mecanismo.
2) La hora saltante y los minutos retrógrados, integrados por primera vez en un reloj de pulsera de la marca. Ambas funciones actúan en sincronía: cuando la aguja de los minutos retrocede instantáneamente a cero al completar la hora, el disco de las horas salta de manera precisa, garantizando una lectura clara e inequívoca del tiempo.
3) La esfera en esmalte Grand Feu, fruto de múltiples cocciones a unos 800 °C, ofrece un brillo y profundidad incomparables, resistentes al paso del tiempo. Cada detalle del movimiento, como los puentes decorados con guilloché manual y el volante de inercia variable, refleja la búsqueda de precisión y belleza que define a Blancpain.
Villeret Tourbillon Volant Heure Sautante Minute Rétrograde referencia 66260 3633 55 B es otra obra maestra de Blancpain que demuestra su dominio, tanto de la complejidad mecánica como de las artes relojeras tradicionales. Te invitamos cordialmente a descubrirlo en Peyrelongue Chronos, donde encontrarás lo más exclusivo de la relojería suiza. AN
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