La exclusividad de Patek Philippe en México
La icónica marca suiza inaugura un espacio único en Artz Pedregal, elevando el lujo y la relojería en el país con una experiencia personalizada para los verdaderos coleccionistas.
Por: Ulises Navarro
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Marichu Negrete
Directora de la boutique Patek Philippe
El 20 de octubre de 2024, el lujo y la alta relojería llegaron a un nuevo nivel en México con la apertura de la primera boutique exclusiva de Patek Philippe en América Latina, ubicada en el prestigioso centro comercial Artz Pedregal. Esta inauguración no solo es un hito para la marca suiza, sino también para el mercado de alta relojería en el país, que ha visto cómo la firma de relojes más codiciada del mundo abre sus puertas en un espacio único, acompañado por el prestigio de Peyrelongue.
“Es un paso muy importante –comparte Marichu Negrete, directora de la boutique–. Patek Philippe siempre había estado presente en joyerías selectas, pero tener una boutique exclusiva es un honor, no solo para nosotros, sino también para nuestros clientes. Es un lugar donde pueden vivir la experiencia completa de la marca, algo que no se había dado antes en México”.
El espacio, que refleja la tradición y la exclusividad de la firma suiza, ha sido un éxito rotundo desde su apertura. “Las personas que visitan la boutique generalmente ya conocen la marca, pero para ellos es una sorpresa encontrarla aquí. Tenemos un tráfico constante, con clientes no solo de la ciudad, sino también turistas que se sienten atraídos por la exclusividad que ofrece la boutique”, comenta Marichu.
| Prestigio, calidad y exclusividad
La boutique alberga 32 modelos diferentes, todos disponibles para la venta, lo que la convierte en un punto de referencia para los verdaderos conocedores y coleccionistas de relojes. “Un Patek Philippe es mucho más que un reloj; es una inversión. Son piezas que se transmiten de generación en generación”, señala la directora. Y es que la marca, con su legado de casi 200 años, ha logrado mantenerse como sinónimo de prestigio, calidad y exclusividad. En la boutique, los clientes pueden encontrar desde modelos más accesibles, como el Calatrava, hasta las complicaciones más exquisitas y raras, como el Rare Handcrafts, una pieza que se talla a mano y cuenta con un calendario perpetuo retrógrado.
Para acceder a estos relojes, sin embargo, los clientes deben estar dispuestos a esperar para poder adquirir una pieza que se ajuste a sus gustos y expectativas. “No tenemos una fecha definida para la entrega de algunas piezas. Las solicitudes son muchas, y se asignan a los clientes según su historial y preferencia”, explica Marichu. En este sentido, la boutique ofrece una atención personalizada, donde cada cliente es guiado por expertos certificados en relojería para seleccionar la pieza perfecta que complemente su colección.
El proceso para ser parte de este exclusivo mundo es riguroso. Los asesores de la boutique, que deben completar una formación intensiva tanto en línea como en la misma manufactura de Patek Philippe en Suiza, son los encargados de brindar un servicio altamente especializado. “No cualquiera puede vender un Patek Philippe –afirma Marichu–. Es un proceso de certificación exhaustivo que asegura que cada asesor no solo conozca los modelos, sino que entienda la historia, la tradición y la microingeniería que hay detrás de cada reloj.”
| México, clave para la marca
La llegada de Patek Philippe a México también ha supuesto una gran noticia para el sector del lujo en el país, que se ha consolidado como un mercado con una rica cultura relojera. “México es un lugar clave para Patek Philippe. Hay una gran pasión por la relojería, y es un mercado donde los coleccionistas y amantes de la alta relojería se han hecho un espacio importante”, asegura la directiva. De hecho, la boutique en Artz Pedregal se suma a las pocas tiendas independientes de Patek Philippe en el mundo, colocándose al mismo nivel que las de ciudades como Nueva York, París y Ginebra.
La ubicación de la boutique, en un centro comercial de lujo como Artz Pedregal, también ha sido estratégica. “Es un lugar ideal para marcas de alta gama como Patek Philippe. Artz Pedregal es sinónimo de exclusividad, y tener aquí a Patek Philippe eleva aún más el nivel de esta plaza”.
La boutique, además de ser un lugar de compra, es un centro de atención al cliente, donde se ofrecen servicios como la recepción de piezas para mantenimiento o restauración. Cualquier reloj, ya sea nuevo o de generaciones pasadas, puede ser enviado directamente al Centro Internacional de Servicio Autorizado de Patek Philippe e incluso a Suiza, si se trata de una pieza antigua o particularmente compleja.
Con la llegada de Patek Philippe a México, la alta relojería ha encontrado un nuevo referente en el país. “Es un orgullo estar aquí, viendo cómo la marca sigue creciendo y cómo estamos logrando conquistar a nuevos clientes. Patek Philippe es mucho más que un reloj. Es arte, es tradición, es una pieza única que acompaña a su dueño a lo largo de toda su vida”, concluye Marichu.
La boutique de Patek Philippe en Artz Pedregal ha llegado para marcar una nueva era en el lujo y la relojería en México, un espacio donde el arte de la microingeniería se fusiona con la exclusividad y el legado de una de las marcas más prestigiosas del mundo. AN
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