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Opinión

Tres niveles de la estrategia y tres habilidades de todo nuevo director de empresa

Por: Francisco Beltrán Guzmán Swipe

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En el contexto que hoy viven las empresas, caracterizado por la incertidumbre y el dinamismo en las dimensiones económica, regulatoria y social, establecer o mantener una estrategia ha representado un gran reto para las organizaciones.

La estrategia se vuelve más importante que nunca ante estos contextos desafiantes y es cuando vale la pena entenderla de una manera más profunda. En el pasado, la planeación estratégica se veía como un proceso estructurado de pasos muy concretos que concluían con un conjunto de iniciativas estratégicas y un plan de acción para las mismas.

En el contexto que hoy viven las empresas, caracterizado por la incertidumbre y el dinamismo en las dimensiones económica, regulatoria y social, establecer o mantener una estrategia ha representado un gran reto para las organizaciones.

El desarrollo de la estrategia requiere ahora de un enfoque más sofisticado. Demanda visualizar diferentes escenarios y diseñar iniciativas que permitan a las organizaciones estar preparadas para superarlos. El resultado es un portafolio de iniciativas que pueden aplicar en la medida en que aparezcan señales de diferentes escenarios o independientemente de los mismos.

| Los tres niveles

Cuando hablo de estrategia, me refiero a tres niveles: 1) el propósito de transformación de la empresa, que conecta tanto con colaboradores como con clientes y  proveedores, y que tiene que ver con hacer una diferencia en el mundo; 2) la estrategia corporativa, que consiste en que la empresa decida el sector en el que participa, y que debe estar ligado con el propósito aspiracional, es decir, en qué mercados voy a participar para hacer esa diferencia; y 3) la estrategia de negocio, o sea, una vez decidido dónde voy a jugar, es preciso establecer el plan para ganar, una propuesta de valor única.

En ese sentido, el director general, también considerado persona vértice por la posición que ocupa en la estructura de gestión, juega un papel fundamental para configurar estos tres niveles de la estrategia. En la estrategia de negocio, es el orquestador de la colaboración con su equipo directivo para desarrollar planes que tengan amplia posibilidad de llegar a la implantación. Además, junto con el presidente del Consejo tiene también un rol fundamental, también como persona vértice, pero en la estructura de gobierno, encabezando el diálogo estratégico con el Consejo de Administración.

El paradigma de que el director general lo sabe todo y lo puede todo se ha transformado.

El paradigma de que el director general lo sabe todo y lo puede todo se ha transformado. Él es quien necesita orquestar y promover la sinergia de su equipo directivo, para que haya una estrategia sólida, involucrando al talento que existe en la organización, y permitiendo que cada uno contribuya en la gran tarea de diseñar e implementar la estrategia.

| El equipo

Hoy, los grandes líderes reconocen que, como equipo, pueden ser más potentes que como individuos. En muchos casos se trata de un modelo de liderazgo de servicio, porque el líder se pone a disposición de los demás para ayudarles, con libertad, pero al mismo tiempo con claridad de propósito, para dirigirlos hacia donde le conviene a la organización para lograr éxito en el largo plazo.

Hoy, los grandes líderes reconocen que, como equipo, pueden ser más potentes que como individuos.

En ese sentido, distingo tres capacidades necesarias para que los líderes logren resultados de alto impacto: 1) la capacidad de ver más allá de lo que pasa en su industria, conectando con ambientes completamente diferentes, disruptivos, que le faciliten ampliar la visión hacia sectores distintos de los que ya conoce; 2) la capacidad de plantear escenarios y abrir paradigmas; y 3) la capacidad de ser auténtico, de ser flexible, abierto y humilde. El líder auténtico conecta con la gente, permite que los demás aprecien sus debilidades e inquietudes como un ser humano. La autenticidad es un sello que hace una gran diferencia en los líderes de la actualidad.

En la medida en que las empresas puedan desarrollar los tres niveles de la estrategia y cuenten con líderes con estas tres habilidades, serán más capaces de enfrentar los desafíos que se vislumbran. AN

 


Francisco Beltrán Guzmán es profesor del área de Política de Empresa de IPADE Business School.

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